Autora: Astrid Ortiz.
Había una vez: una viejita que tenía un perrito
invidente pero inteligente, que todos los días la acompañaba a hacer sus tareas
de la vida cotidiana. Iban juntos al mercado, al parque, al médico, al
veterinario, a hacer ejercicio… bueno, todo un sinfín.
Pero seguramente te preguntarás:
¿Cómo puede ser inteligente un perrito
invidente? (pregunta que en esta ocasión la daré por buena, ya que esto podría
ser algo descomunal. Sin embargo, lo sorprendente es que este perrito sabía
hacer casi cualquier cosa que tanto a la dueña, como incluso a nosotros y al
mismo perrito se nos pudo haber ocurrido; ya te enterarás si sigues disfrutando
de esta historia.
Un día, la viejita estaba recostada en su cama
viendo la televisión, mientras el perrito jugaba con su computadora, cuando de
pronto, al perrito le da hambre y va a decírselo a su dueña.
Es así como los 2 entran a una tienda, ven una
caja de galletas en un estante muy alto pero muy alto, y la viejita no lo pudo
bajar, entonces pidió ayuda a los trabajadores de la tienda. Y es que el
estante estaba tan alto pero tan alto; tanto, que ni los propios personales
podían bajarla, y la viejita (con coraje) respondió: --“¡es completamente
iluso!; si ni si quiera ustedes pueden bajar la caja de galletas ¿por qué la
ponen en ese estante?”--. Los trabajadores respondieron totalmente tranquilos y
profesionales: --“desconocemos el motivo, señora; ya que quienes pusieron las
galletas en ese lugar fueron los dueños de la tienda, y no hicieron de nuestro
conocimiento las razones”.
Pero: ¡vaya sorpresa!:
El perrito invidente pero inteligente pudo oler
que cerca de él se encontraban unas cajas, y con todas sus fuerzas y la ayuda
de los empleados, apiló todas las cajas (una por una) al punto de formar una
escalera para poder subir al estante y bajar la otra caja de galletas.
Al terminar la aventura, la viejita y el
perrito fueron a la caja registradora para poder pagar sus compras, y la cajera
(quien vio toda la escena mas no fue para ayudar) tuvo una conversación con la
viejita:
Cajera: --“¡señora!: ¿de dónde tan asombroso
perrito?”—
Viejita: --“¡hhhhhhhhhhhhhhhhhhh!; me lo
regalaron mis padres, hace muchíiiiisiiimos aaañoooos. (es un perrito
invidente)”—
Cajera: --“¡PERO ES MUUUUUUUUUY INTELIGENTEEE!”—
Personajes:
viejita
perrito invidente pero inteligente
trabajadores / personal / empleados.
Cajera.
Sígueme en mis redes sociales:
Facebook y Twitter.https://twitter.com/OP_Astrid
